Cómo elegir la silla de paseo adecuada para tu bebé

Escoger la silla de paseo más adecuada para tu bebé es fundamental porque lo acompañará durante al menos tres años. Por esta razón, desde la Tienda de Mamá te hemos preparado una lista de características que no hay que pasarse por alto a la hora de elegir la silla de paseo más adecuada para tu bebé. ¿Estás lista?

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Características fundamentales de una silla de paseo para bebés

Hay varios factores a considerar a la hora de elegir una silla de paseo para tu bebé:

  • Seguridad: asegúrate de elegir una silla de paseo con cinturones de seguridad de 5 puntos y un buen sistema de frenado.
  • Comodidad: el asiento debe ser confortable para tu bebé y tener un respaldo reclinable para que pueda dormir cómodamente.
  • Portabilidad: si planeas llevar la silla de paseo contigo a menudo, elige una que sea fácil de plegar y transportar.
  • Durabilidad: elige una silla de paseo de buena calidad para garantizar que dure mientras tu bebé crece.
  • Tu presupuesto: hay una gran variedad de sillas de paseo en el mercado, con precios que varían considerablemente. Asegúrate de elegir una silla que se ajuste a tu presupuesto y que cumpla con tus necesidades.

¡Veámos algunos en detalle!

Ángulo máximo de reclinación

Si queremos utilizarla desde los primeros días de vida del bebé, debemos optar por una versión con respaldo totalmente reclinable (al menos hasta 150 grados, preferiblemente 180 grados). También es buena idea contar con la posibilidad de elevar el extremo del asiento (el reposapiés), que pasará por debajo de las rodillas cuando el bebé haya crecido. De este modo, el bebé dispondrá de un espacio bien cerrado y cómodo para dormir. Por otro lado, a partir de los seis meses, también son adecuadas las sillas de paseo con respaldo reclinable en distintas posiciones. Por lo tanto, para los bebés un poco mayores, que a menudo tienden a no apoyarse en el respaldo, es una buena idea que el asiento se eleve casi hasta los 90 grados en posición vertical.

Peso y plegabilidad marcan la diferencia

Si vives en una ciudad con vías estrechas y aceras angostas, si tomas el transporte público o tienes que cargar el cochecito en un utilitario con maletero pequeño, si tienes puertas y ascensores estrechos, el peso y el tamaño (tanto cerrado como abierto) se vuelven cruciales. También es importante saber si el cochecito se puede plegar con una mano (porque con la otra puedes estar sujetando al niño) y si, una vez plegado, se mantiene de pie por sí solo.

Fíjate en las ruedas

El manillar tiene que ser regulable en altura, tiene que tener bloqueo de ruedas y freno de manillar para que sea manejable y práctico, y el espacio bajo el asiento muy amplio. Comprueba que todas las ruedas se mueven en todas las direcciones y se bloquean en una posición fija. Que sean integrales o con cámara de aire, dobles o individuales, pequeñas o grandes: todo esto afecta a la maniobrabilidad, especialmente en terrenos irregulares (no necesariamente si tienes que ir de excursión a la montaña, sino también si simplemente vas al parque, si circulas por carreteras adoquinadas).